La disfunción eréctil es una afección frecuente entre los hombres mayores de 40 años. Alrededor de 10% de los hombres de entre 40 y 70 años experimentan disfunción eréctil total, que se caracteriza por la incapacidad de lograr una erección suficientemente duradera para la actividad sexual. Además, dentro de este grupo de edad, aproximadamente 35% de los hombres sufren episodios intermitentes de disfunción eréctil. Aunque menos frecuente, esta afección también afecta a entre 5% y 10% de los individuos menores de 40 años.
Obesidad y disfunción eréctil
En Estados Unidos, la aparición de disfunción eréctil puede atribuirse a la diabetes y la obesidad, lo que se traduce en aproximadamente 8 millones de diagnósticos. Los estudios de investigación han indicado una correlación directa entre el índice de masa corporal (IMC) y la probabilidad de padecer disfunción eréctil. A medida que aumentan los niveles de IMC, también aumenta la probabilidad de padecer esta afección.
¿Qué es el IMC?
El IMC, que significa "Índice de Masa Corporal", es un valor numérico que se obtiene dividiendo el peso de una persona en kilogramos por el cuadrado de su altura en metros. Es importante señalar que el IMC no mide directamente la grasa corporal y no tiene en cuenta factores como la edad, el sexo, la etnia o la masa muscular. No obstante, el IMC de una persona tiende a fluctuar en función de su porcentaje de grasa corporal, y un IMC más alto se ha asociado a una mayor probabilidad de experimentar disfunción eréctil.
Perder peso puede revertir la disfunción eréctil
En el estudio mencionado, un grupo de 110 hombres clasificados como obesos, con edades comprendidas entre los 33 y los 55 años, participaron en un programa de dos años que incluía ejercicio y mejoras dietéticas. Al final del período de dos años, los participantes experimentaron una pérdida media de peso de 33 libras. En particular, alrededor de un tercio de los participantes informaron de una notable mejora en su capacidad para lograr una erección.

La obesidad es un factor de riesgo elevado de DE
La mayoría de los hombres, concretamente cuatro de cada cinco, que experimentan disfunción eréctil tienen un IMC superior a 25. Además, las personas con un IMC superior a 28,7 tienen una probabilidad 30% mayor de desarrollar disfunción eréctil. Para proporcionar un poco de contexto, un hombre que mide 6'0″ de altura pesaría aproximadamente 210 libras para alcanzar ese umbral de IMC. Vale la pena señalar que el sobrepeso no sólo aumenta el riesgo de disfunción eréctil, sino que también expone a hombres y mujeres a otros problemas de salud, como enfermedades del corazón, hipertensión arterial y diabetes tipo 2.
Otras enfermedades que aumentan el riesgo de DE
Los hombres que padecen enfermedades como hipertensión, diabetes o prediabetes corren un mayor riesgo de sufrir disfunción eréctil. Además, los que consumen alcohol en exceso o toman determinados medicamentos para la tensión arterial también son más propensos a padecer esta afección.
¿Por qué la obesidad aumenta el riesgo de DE?
En esencia, el exceso de peso dificulta el flujo sanguíneo en el organismo. Del mismo modo que el alcohol y ciertos medicamentos para el corazón pueden reducir la presión arterial y aumentar la probabilidad de sufrir disfunción eréctil al reducir la circulación sanguínea en el pene, el sobrepeso estrecha los vasos sanguíneos, lo que provoca un efecto similar de restricción del flujo sanguíneo necesario para lograr una erección.
La obesidad puede dañar los vasos sanguíneos
Incluso las personas jóvenes y sanas que engordan tan sólo 2,5 kilos de grasa en la zona abdominal son susceptibles de desarrollar una disfunción de las células endoteliales. Estas células desempeñan un papel crucial en el revestimiento de los vasos sanguíneos y en la regulación de su capacidad para expandirse o contraerse. Esta afección está relacionada con un mayor riesgo de enfermedad coronaria y otras complicaciones cardiovasculares.
En individuos que experimentaron un aumento de peso en la región abdominal, concretamente en forma de grasa visceral, los investigadores descubrieron que, a pesar de mantener una presión arterial saludable, la regulación del flujo sanguíneo a través de las arterias de sus brazos se veía comprometida debido a una disfunción endotelial. Sin embargo, cuando estos voluntarios lograron deshacerse del exceso de peso, el flujo sanguíneo se restableció a niveles normales.

¿Puede revertirse la disfunción eréctil sin medicación?
En un exhaustivo estudio de seguimiento de 810 hombres que sufrían diversas formas de disfunción eréctil, se observaron notables progresos en la reversión de la afección. En un periodo de cinco años, aproximadamente 29% de los hombres pudieron revertir con éxito la disfunción eréctil mediante métodos naturales. El estudio reveló además que incluso en los casos en que los hombres recurrían a la medicación para el tratamiento, el tratamiento de los factores relacionados con el estilo de vida mejoraba significativamente la eficacia de la medicación.
El autor principal del artículo, el Dr. Sean Martin, del Centro para la Salud Masculina de la Fundación de los Masones de la Universidad de Adelaida, afirma: "Incluso cuando se requiere medicación para ayudar a la función eréctil, es probable que ésta sea considerablemente más eficaz si también se tienen en cuenta los factores relacionados con el estilo de vida".
Medicación para controlar la obesidad
Orlistat
Si tiene problemas de disfunción eréctil y sospecha que su peso puede ser un factor contribuyente, es aconsejable que consulte a su médico acerca de Orlistat. El orlistat, también disponible bajo las marcas Alli o Xenical, actúa inhibiendo la absorción de grasas en el sistema digestivo, lo que contribuye a la pérdida de peso. Al incorporar Orlistat a su régimen, puede conseguir una pérdida de peso más rápida y significativa que si sólo se basa en la dieta y el ejercicio.
Rybelsus
Rybelsus es un medicamento que se utiliza principalmente para el tratamiento de la diabetes de tipo 2, pero que también ha demostrado su potencial para ayudar a perder peso. Contiene el principio activo semaglutida, que pertenece a una clase de fármacos llamados agonistas de los receptores GLP-1. Cuando se toma por vía oral, Rybelsus actúa imitando la acción de la hormona llamada glucosa. Cuando se toma por vía oral, Rybelsus imita la acción de una hormona llamada péptido-1 similar al glucagón (GLP-1), que regula los niveles de azúcar en sangre y el apetito. Al activar los receptores de GLP-1 en el cerebro, Rybelsus ayuda a reducir el apetito y aumentar la sensación de saciedad, lo que conduce a una disminución de la ingesta calórica. Esto puede provocar una pérdida de peso como parte de un plan de tratamiento integral que incluya una dieta sana y ejercicio. Es importante tener en cuenta que Rybelsus sólo debe tomarse bajo la orientación y prescripción de un profesional sanitario.
Medicamentos contra la disfunción eréctil
Existen varios medicamentos de amplio uso para ayudar a disfunción eréctil. Si usted tiene sobrepeso y necesita ayuda para lograr una erección antes de la pérdida de peso, usted puede considerar la compra de sildenafil u otros medicamentos conocidos para la disfunción eréctil como Cialis(Tadalafil) o Levitra. Estos medicamentos pueden proporcionar el apoyo necesario para alcanzar los objetivos de pérdida de peso. Sin embargo, es fundamental consultar con un profesional sanitario antes de empezar a tomar cualquier medicamento nuevo.
Conclusión
Si tiene sobrepeso y padece disfunción eréctil, perder el exceso de peso podría revertir el problema. Además, aunque no se logre la recuperación completa de la disfunción eréctil, perder peso puede aumentar la eficacia de Medicamentos para la disfunción eréctil. Es aconsejable que consulte a su médico lo antes posible para diseñar un plan adecuado que aborde tanto sus problemas de obesidad como de disfunción eréctil.
Fuentes:
https://www.healthline.com/health/erectile-dysfunction/weight-loss-and-ed
https://rexmd.com/learn/can-weight-loss-treat-erectile-dysfunction
https://www.webmd.com/men/weight-erectile-dysfunction
https://www.verywellhealth.com/obesity-and-erectile-dysfunction-5202283